De la misma manera que otras naciones de todo el mundo, Irán sigue manteniendo una política ambigua con las criptomonedas, basada en "Yo tampoco te quiero".
Al igual que Venezuela con su Petro, por ejemplo, el fenómeno también debe ponerse en perspectiva en un contexto excepcionalmente restringido: un entorno regional difícil, un régimen autoritario teocrático, sanciones internacionales y, más particularmente, Estados Unidos, etc.
En este complejo entorno, las autoridades judiciales del país acaban de incautar a 1000 mineros de bitcoin en dos fábricas abandonadas, aunque este tipo de instalación está prohibida en la República Islámica.
Irán y las criptomonedas
Irán se vio sometido a fuertes restricciones debido a la salida de Estados Unidos del acuerdo sobre la energía nuclear con importantes sanciones internacionales. Su moneda, el Rial, perdió gran parte de su valor. Una minoría de la población vio el Bitcoin como una salida.
Teherán, como muchos países alrededor del mundo, jugó a "un paso adelante, dos pasos atrás", que resulta de una forma de consenso: la prohibición en abril del 2019 por parte del Banco Central de Irán de cualquier comercio criptográfico, y la reflexión al mismo tiempo sobre el proyecto PayMon (PMN), una moneda central iraní respaldada en oro y administrada por cuatro bancos locales.
Irán, ¿un paraíso minero?
Prohibición no significa extinción, especialmente porque Irán presenta fuertes razones para cualquier entusiasta de bitcoin, y más precisamente su minería: un costo de energía increíblemente bajo, debido a los recursos propios del territorio (0.006 $ por kWh). En otras palabras, la minería Bitcoin es particularmente rentable en Irán y, entre ellos los chinos que se están trasladando de manera masiva a la antigua Persia.
Sin embargo, la situación no es tan optimista como parece para los mineros de Bitcoin. Según Reuters, la televisión nacional de Irán ha informado que las autoridades judiciales han incautado a 1.000 mineros de Bitcoin.
Motivo de esta incautación: ¡las instalaciones han causado un aumento del 7% en el consumo de energía durante el mes de junio en la región! Una cifra sorprendente, ya que el consumo per cápita (datos de 2014) a la población total, se obtiene un consumo de más de 240.000 MWh. Para que estas fincas representen el 7% del consumo, deberían haber consumido alrededor de ... ¡16.800 MWh!